Estrategias terapéuticas para el nuevo milenio. Celulomica:
clones, células troncales y tejidos bioartificiales
(Síntesis)
Miranda Gálvez Gabriel Vidblain
La
diversificación de células embrionarias está estrechamente ligada con el
resultado de las células troncales. Dichas células tienen la capacidad de auto
regenerarse durante toda la vida de un individuo, es decir, tienen la capacidad
de dividirse y originar células troncales. Este tipo de células, inicialmente,
son totipotenciales, que en otras palabras, son células que pueden especializarse
en cualquier linaje específico del organismo.
En
1970, tras un experimento, John Gurdon, demostró que un tipo celular adulto
especializado contiene toda la información genética necesaria para formar un
nuevo organismo. Para ello, extrajo el núcleo de una célula cutánea de una rana
adulta y lo introdujo en un óvulo fecundado, obteniendo el desarrollo de un
renacuajo y posteriormente una rana adulta.
Siguiendo
el mismo modelo, Wilmut trasplantó el núcleo de una célula epitelial,
procedente de una glándula mamaria, a un óvulo enucleado (sin núcleo) para
crear el clon de la oveja Dolly.
Las
técnicas de clonaje y reprogramación celular, más adelante resultarían en el desarrollo
de terapia celular, ambas solventarían los problemas de inmunocompatibilidad y
rechazo de órganos.
Cómo
se mencionó anteriormente, las células del ser humano tienen la capacidad de
regenerarse, sin embargo, cuando el daño es irreparable el tejido u órgano debe
ser remplazado.
Por
otra parte, la técnica de tejidos u órganos es limitada debido a la falta de
donantes y compatibilidad entre órganos de la misma especie o de tejidos entre
diferentes especies.
Pese
a ello, la medicina regenerativa surge como alternativa, tanto para la reparación
de órganos como para su reemplazamiento bajo un modelo de cuatro fases:
1. Reproducción de mecanismos de reparación.
2. Implantación de tejidos u órganos compatibles
3. Utilización de tecnologías para rejuvenecer tejidos deteriorados.
4. Aplicación de nanotecnología para reconstruir órganos.
Dentro
de la terapia celular, las células utilizadas, células cutáneas como por
ejemplo, deben ser disponibles y libres de patógenos, de tal manera que ofrezca
la investigación in vitro e inclusive
como fuente de células destinadas a trasplantes y/o terapia regenerativa.
Las
células troncales pueden proliferar en un medio de cultivo y dar lugar a
células especializadas mejor conocidas como células pluripotenciales. Se
entiende como célula pluripotencial a la célula capaz de dar lugar a cualquiera
de los tipos celulares derivados de las tres capas embrionarias.
Actualmente
las células pluripotenciales pueden extraerse de diversas fuentes del cuerpo
humano para diversas circunstancias, un claro ejemplo de ello son las células
de la médula ósea que no solo mantienen en número de células sanguíneas, sino
también pueden contribuir al mantenimiento de las células musculares, neuronas,
hepatocitos, entre otros.
Incluso
células ya especializadas pueden ser reprogramadas y re direccionadas a un
sitio de interés, en caso de que exista uno, de manera que pueda llevase a cabo
un proceso de inversión en el estado diferenciado y pueda, posteriormente,
formar células troncales pluripotenciales disponibles para cualquier emergencia
o daño.
Referencia:
García
Barreno Pedro. (2007). Estrategias terapéuticas para el nuevo milenio.
Celulomica: clones, células troncales y tejidos bioartificiales. Revistas de la
real academia de ciencias exactas; física natural. 9:231-24 pp.