Universidad de Guanajuato
División de Ciencias Naturales y Exactas
Biología Experimental
Enero-Junio 2018
ESTUDIO DEL BOBMEO DE PROTONES POR LEVADURAS; EFECTO DE LOS INHIBIDORES EN LA CADENA TRASNPORTADORA DE ELECTRONES Y DESACOPLANTES
Miranda Gálvez Gabriel Vidblain
OBJETIVOS
Relacionar el consumo de glucosa
con los cambios de pH producidos por levaduras a nivel de la cadena
transportadora de electrones bajo el efecto de un inhibidor y un desacoplante
de la misma.
INTRODUCCIÓN
Las ATPasas son una importante
familia de enzimas que emplean la energía de la hidrolisis del ATP para
transportar solutos en contra de su potencial electroquímico, entre ellas se
encuentran las de tipo P, que están implicadas en el bombeo activo de iones a
través de las membranas celulares. En plantas y hongos la ATPasa de este tipo
que predomina es la H+-ATPasa.
En levaduras, esta misma enzima
es crucial para su crecimiento y metabolismo ya que constituyen en mayor medida
el sistema de regulación de pH y absorción de nutrientes. La enzima energiza la
membrana mediante la expulsión de hidrogeniones, lo que genera un potencial eléctrico
de membrana y un gradiente de pH, siendo más positivo y por tanto más ácido en
el exterior. Esto produce un flujo de
entrada de nutrientes y salida de aniones, para neutralizar la carga negativa
del citosol ingresan iones K+ gracias a las proteínas
trasportadoras que también se encuentran
en la membrana.
Los dos factores más importantes
que regulan la actividad de estas ATPasas son la acidez del medio y la
oxidación de la glucosa. El metabolismo de la glucosa modifica las propiedades
cinéticas de la enzima mientras que la acidificación del medio durante el
crecimiento de la levadura provoca un descenso del pH citosólico y por
consecuencia, se activa la enzima con el fin de bombear protones al exterior,
liberado así hidrogeniones, responsables de dar al medio el carácter ácido.
Por otro lado, en la membrana
interna de la mitocondria está presente la ATP sintasa, cuya función por el
contrario es sintetizar ATP mediante un mecanismo conocido como fosforilación
oxidativa, cuyo nombre proviene del hecho de que una molécula de ADP adquiere
un fosfato más (se fosforila), simultáneamente con una serie de transferencia
de electrones que oxidan distintas moléculas de carácter proteico o lipídico,
estos electrones provienen de los hidrógenos originados en ciclo de Krebs.
Estas moléculas se encuentran
formando una cadena que concluye con el
oxígeno, en algunos pasos durante el transporte de electrones se bombean
hidrogeniones hacia el espacio intermembranal, los cuales tienen una gran
tendencia a regresar al interior o a la matriz mitocondrial y su movimiento
representa una forma de energía. Así se genera una fuerza (la fuerza
protomotriz) capaz de proveer la energía que requiere la síntesis de ATP
aprovechada por la ATP sintasa, misma que forma parte de esta cadena
transportadora de electrones. Estas dos enzimas tienen en común el bombeo de
protones.
Sin embargo, hay una serie de
sustancias que pueden modificar el funcionamiento normal de la fosforilación
oxidativa, algunos son capaces de bloquear el transporte de electrones a
distintos niveles, otros inhiben las reacciones del sistema fosforilante y
algunos otros, desacoplan el sistema impidiendo la formación de ATP. Esto
afecta de manera secundaria las condiciones del citosol y en el caso de ser una
levadura, la ATPasa intervendrá.
MATERIAL Y REACTIVOS
-
3 Matraces Erlenmeyer de 250 mL
- Potenciómetro
- Piseta
- Levadura es suspensión
- Glucosa al 10%
- Micropipeta de 100-1000 µL
- Solución de azida de sodio
400mmol/L
- Solución de 2,4-dinitrofenol
400mmol/L en etanol
PROCEDIMIENTO
- Dentro
de cada matraz Erlenmeyer se depositaron 5 mL de levadura en suspensión, mismos
que se diluyeron en 40 mL de agua.
- Durante
un periodo de aproximadamente 20 minutos se midió tres veces el pH de cada uno,
lavando el instrumento con agua destilada entre cada medición para evitar
errores de medida.
- Posteriormente
al matraz dos se le añadieron 0.2 mL de solución 2,4dinitrofenol y al
matraz tres se le añadieron 0.5 mL de solución azida de sodio.
- Transcurridos
5 minutos se continuó con una cuarta y última medición de pH, esto con el fin
de obtener el pH basal en cada condición.
- Más tarde a cada
matraz se le añadieron 5 mL de glucosa 10%.
- Cada
cinco minutos se tomaron datos de pH de cada matraz hasta el minuto 20. Para
finalizar se tomaron datos cada diez
minutos hasta el minuto 40. Con estos se construyó una gráfica.
RESULTADOS
Tabla I. pH registrado de acuerdo al tiempo antes y después de cada condición, asi como el pH basal calculado para cada uno.
Tiempo (min)
|
Matraz 1
|
Matraz 2
|
Matraz 3
|
0
|
5.95
|
5.87
|
5.84
|
9
|
5.69
|
5.74
|
5.81
|
18
|
3.70
|
5.72
|
5.61
|
|
Control
|
Con dinitrofenol
|
Con azida
|
25
|
5.43
|
5.43
|
5.95
|
Tiempo/ pH basal
|
5.19
|
5.69
|
5.80
|
5
|
4.84
|
4.75
|
5.90
|
10
|
4.37
|
4.40
|
5.82
|
15
|
4.34
|
4.51
|
5.75
|
20
|
4.23
|
4.52
|
5.73
|
30
|
4.16
|
4.19
|
5.69
|
40
|
4.12
|
4.17
|
5.63
|
Imagen 1; Comportamiento del pH a cada condición.
DISCUSION
El comportamiento de pH para el
ensayo con azida de sodio muestra una línea casi constante, esto se debe a que
la azida de sodio es un inhibidor de la cadena transportadora, siendo más
específico actúa en el último paso, en el complejo IV. Para comprender bien esto,
debemos recordar que la cadena transportadora consta de cinco proteínas o cinco
complejos, el complejo uno (NADH deshidrogenasa) toma los electrones en forma
de hidrógeno del NADH que, como se mencionó en la introducción, provienen del
ciclo de Krebs y los cede al complejo tres (citocromo reductasa) en el proceso
transloca o bombea hidrogeniones de la matriz mitocondrial hacia el espacio
intermembranal, de manera simultánea el complejo dos (succinato deshidrogenasa)
toma los electrones en forma de hidrogeno del FADH y los cede al complejo tres,
para este caso no hay bombeo de protones. No obstante, en estos procesos
interviene una proteína periférica que se mueve libremente de uno a otro
complejo moviendo los electrones. El complejo tres conduce los electrones
recibidos al complejo IV por otra proteína “móvil” y en el proceso bombea
protones. Finalmente el complejo IV (citocromo oxidasa) acopla los electrones
al oxígeno para formar agua y en el proceso libera protones.
Teniendo esto, si la azida de
sodio bloquea este complejo, entonces, se bloquea también el bombeo de protones
que resultaba de su actividad. Así, solo los complejos I y III bombearán, lo
que significa que habrá pocos hidrogeniones siendo bombeados a comparación de
la condición normal, esta disminución de hidrogeniones por lógica no promoverá el carácter ácido del citosol y por tanto las
ATPasas, ya en la membrana celular, no tendrán mucha actividad, es decir, no
liberaran los hidrogeniones en exceso del citosol al medio y por consecuente no
veremos disminución significativa de pH, tal como sucedió. Sin embargo, sí se
observa una ligera variación de pH pero esto no se atribuye a la acción de la
azida, sino muy probable por la oxidación de la glucosa en cada célula de
levadura. Independientemente de que el complejo IV está bloqueado, la célula continua
metabolizando glucosa, bombeando protones en la cadena y sintetizando ATP,
claro, a menor proporción. De acuerdo con la literatura, cuando la levadura
metaboliza esta azúcar, las ATPasas sufren
cambios cinéticos, en otras palabras, aumentan su afinidad y esto las vuelve
activas, expulsando los hidrogeniones que se escapan de la matriz y
acidificando el medio.
Por esta misma razón observamos
un descenso de pH en el matraz control, ya que el proceso de oxidación de
glucosa hasta cadena transportadora está en pleno funcionamiento y recordemos
también, que no todos los protones bombeados desde la matriz reingresan a ella,
sino que hay unos que se difundirán a través de la membrana externa, que por
cierto es muy permeable, y se depositaran en el citosol activando las ATPasas.
Finalmente, en el comportamiento
del pH para el ensayo con 2,4-dinitrofenol se observa una pendiente bien
definida producida por el aumento de hidrogeniones en el medio producto de la
actividad de este compuesto a nivel de la cadena transportadora. El
2,4-dinitrofenol es un desacoplante y
tiene como efecto el bloqueo de síntesis de ATP, esto lo logra debido a que se
ancla a la membrana interna justo igual
como los complejos antes mencionados, es precisamente este anclaje el que daña
las propiedades permeables de la membrana y permite así que los hidrogeniones
reingresen a la matriz en mayor medida a través del poro que creó y no a través
de la ATP sintasa, sin esta energía protomotriz no se sintetiza ATP. De esta
manera la concentración de protones se iguala en ambos medios, pero, por el
bombeo continuo de protones, el exterior alcanza en algún punto mayor
concentración de hidrogeniones y algunos de los protones escapan de la matriz
hacia el citosol por gradiente eléctrico, estos hidrogeniones en exceso
entonces son expulsados por la ATPasa y una vez afuera de las células promueven
un descenso rápido y significativo de pH, tal como se observa en la gráfica.
CONCLUSIONES
El consumo de glucosa no solo
comprende su oxidación (glucolisis,) sino que otros procesos también
intervienen más adelante, como el ciclo de Krebs y la cadena transportadora de
electrones, esta última es la responsable de los cambios de pH en el citosol cuando
los protones (H+) difunden hacia el citosol. Podremos observar estos cambios experimentalmente ya
sea inhibiendo la producción de los mismos o favoreciendo su concentración
siempre y cuando sea aplicado a organismos capaces de liberarlos al medio, porque
por el contrario, organismos superiores realizan esta regulación con otro tipo
de especie químicas a partir de buffers fisiológicos.
COMENTARIOS
Los tiempos de medición
difícilmente serían exactos ya que solo había un potenciómetro para satisfacer
todos los ensayos de todos los equipos.
Por otra parte, debió haber sido
necesario recabar al menos dos datos más para construir la línea basal de los
matraces que contenían inhibidor y desacoplante, respectivamente.
REFERENCIAS
Peña Díaz Antonio, Arroyo Begovich Ángel, Gómez Puyou
Armando y Tapia Ibargüegoytia. (2003). Fosforilación oxidativa En Bioquímica. Limusa; México. 228229
pp.
Peña Antonia y Dreyfus Georges. (1997). La energía del mundo
animal: el aprovechamiento de los alimentos En
La energía y la vida: bioenergética. Fondo de cultura económica; México. 55-58
pp.
Trujillo del Río Cristina.
(2016). Regulación de la H+ -ATPasa de la membrana plasmática de levadura por
la proteína quinasa TOR, la proteína fosfatasa Sit4 y la proteína de unión a
RNA Ssd1. Universidad Politécnica de Valencia. 2-5 pp.